Cada vez es más evidente la necesidad de otro modelo de masculinidad. Un modelo basado en los afectos, las emociones… en la
sostenibilidad de la vida y, no sólo, en cubrir las necesidades básicas y “ser
el cabeza de familia”. Desde esta visión, creo que el modelo tradicional de
paternidad hace mucho daño, tanto a los y las menores como a sus propios padres
y madres.
Es un modelo cruel que no debe perdurar, pero es el
predominante. Cada vez que me hablan de custodias compartidas me rechinan los
dientes. ¿Compartidas? Si una persona no se ha ocupado de su hija o hijo desde
su nacimiento ¿por qué quiere, en el divorcio, la custodia compartida? Aquí,
realmente no hay género, me da igual si es madre o padre. Si no te has ocupado
de tu hija o hijo, no entiendo por qué quieres su custodia. Si tu forma de
educar se ha centrado en cubrir sus necesidades materiales dejando de lado el
resto de componentes que implica la educación de un niño o niña, ¿el divorcio
va a ser el punto que haga que ahora sí te impliques en la educación de tu hijo
o hija?
Si miro las estadísticas, me dicen que las madres cumplimos
nuestro rol de maternidad tal y como dictó el siglo XIX (este modelo también me
da miedo) y, que son los padres los más
tendentes a ocupar el rol de “sustentadores” del hogar. Es evidente que, desde
la infancia, las personas necesitamos no sólo alimentos, una casa… sino de
aceptación, reconocimiento, afecto, unos valores… De ahí, mi reclamo de otro
tipo de paternidad y maternidad.
A mí, la custodia compartida me da pánico. Son muchas las
razones. Imaginaos: yo no me llevo bien con mi expareja y puedo utilizar a mi
hija o hijo para el control y la
coacción de mi ex. Esto se vive día sí y día también en los casos de violencia de género cuando en un juzgado se dicta la custodia compartida.

1 comentarios :
Estoy completamente de acuerdo.
Ni custodias, ni visitas para maltratadores:
Recogida de firmas: www.efirmas.com/404347/index.html
Publicar un comentario
La editora no se hace responsable de los comentarios vertidos por terceras personas. No se permitirán comentarios ofensivos. Se pide el máximo respeto.