Kulturfem: Alice Guy-Blanché

Alice Guy  (1873-1968) contaba historias. Para ello utilizaba una cámara de 60mm. De hecho, es la primera directora de la historia del cine. Entre sus méritos encontramos el hecho de grabar las primeras historias cinematográficas con argumento.  Lo llamaba pequeñas historias. Y, de esas pequeñas historias surge una guionista, directora, diseñadora de vestuario… y, en definitiva, una creadora  que, a día de hoy, es un icono del feminismo.  Se trata de una mujer con fuerza y valentía, capaz de enfrentarse y meterse en el bolsillo a la industria masculinizada del cine. Realizó más de 600 películas tocando todos los género fílmicos: cuentos de hadas, películas policíacas, comedia, drama, western…

Hablar de Alice Guy es hablar de la primera mujer cineasta, de la autora de la primera película narrativa de la historia, de la fundadora del cine con narración cultural, de la primera persona que dirigió una película, de una productora y directora independiente, de la primera persona que utilizó el gramófono y las imágenes, de la precursora de los efectos especiales, del uso de la doble exposición del negativo, de las técnicas de retoque, la cámara lenta y rápida, del movimiento hacia atrás…. Y, aun así, es una auténtica desconocida.

No solo se conformó con hacer cine, sino que puso en la palestra películas donde las protagonistas eran mujeres dueñas de su destino. Ella sabía que no hay nada que una mujer no pudiera hacer tan bien como un hombre.

Entre sus películas encontramos “La llamada de la Rosa”, “La Esmeralda”, “Ningún hombre amó tanto”,  “El hada de la primavera”, “My Madonna”, “Shadows of Moulin Rouge”…  Entre sus producciones, destaca “In the year 2000”, cuyo género es la ciencia ficción, y sitúa a las mujeres del año 2000 como las protagonistas y las figuras que gobiernan el mundo.

Un ejemplo de su trabajo lo encontramos en el film conocido como “Le resultant du feminisme”,  grabado en 1906 y que muestra un intercambio de roles entre mujeres y hombres. Os recomiendo que no lo paséis por alto. Dura 6 minutos.

Imprescindibles feministas

¿Cuántas muertas son muchas? Los asesinatos de mujeres continúan. ¿Cuándo se hará justicia? Mujeres de arena es una obra de teatro que denuncia la realidad de los feminicidios de Ciudad Juárez. Visibiliza y da voz a las más de 700 mujeres y niñas brutalmente asesinadas anualmente. Es teatro que lucha a favor de la justicia y contra más de 18 años de impunidad, indiferencia y negligencia gubernamental y del resto del mundo que mira hacia otro lado.

Si te interesa puedes verla en Madrid, en el Círculo Catalán (Plaza de España, 6), los días 7, 8 y 9 de marzo. Puedes comprar tus entradas en la Federación de Mujeres Jóvenes o llamando por teléfono al 91 319 68 46, cuestan 10€.

¿Cuándo deja un o una menor de sufrir violencia de género?

Cada vez es más evidente la necesidad de otro modelo de masculinidad. Un modelo basado en los afectos, las emociones… en la sostenibilidad de la vida y, no sólo, en cubrir las necesidades básicas y “ser el cabeza de familia”. Desde esta visión, creo que el modelo tradicional de paternidad hace mucho daño, tanto a los y las menores como a sus propios padres y madres.

Es un modelo cruel que no debe perdurar, pero es el predominante. Cada vez que me hablan de custodias compartidas me rechinan los dientes. ¿Compartidas? Si una persona no se ha ocupado de su hija o hijo desde su nacimiento ¿por qué quiere, en el divorcio, la custodia compartida? Aquí, realmente no hay género, me da igual si es madre o padre. Si no te has ocupado de tu hija o hijo, no entiendo por qué quieres su custodia. Si tu forma de educar se ha centrado en cubrir sus necesidades materiales dejando de lado el resto de componentes que implica la educación de un niño o niña, ¿el divorcio va a ser el punto que haga que ahora sí te impliques en la educación de tu hijo o hija?

Si miro las estadísticas, me dicen que las madres cumplimos nuestro rol de maternidad tal y como dictó el siglo XIX (este modelo también me da  miedo) y, que son los padres los más tendentes a ocupar el rol de “sustentadores” del hogar. Es evidente que, desde la infancia, las personas necesitamos no sólo alimentos, una casa… sino de aceptación, reconocimiento, afecto, unos valores… De ahí, mi reclamo de otro tipo de paternidad y maternidad.

A mí, la custodia compartida me da pánico. Son muchas las razones. Imaginaos: yo no me llevo bien con mi expareja y puedo utilizar a mi hija o hijo para el control  y la coacción de mi ex. Esto se vive día sí y día también en los casos de violencia de género cuando en un juzgado se dicta la custodia compartida.

Pongámonos en el caso en el que el padre tiene una sentencia en firme como maltratador. Es decir, el padre maltrata física y/o psicológicamente a la madre. Afortunadamente, no maltrata al o la menor de forma directa; aunque no es difícil imaginar que ese o esa menor vive los efectos de esa violencia: puede verlo, vive sus consecuencias, vive un estrés emocional continuo, etc. Si en ese caso hubiera custodia compartida, ¿os resulta difícil imaginar a ese o esa menor siendo utilizado/a para seguir ejerciendo violencia contra su madre? Y, entonces, ¿cuándo deja de sufrir violencia en sus carnes?

Imprescindibles feministas

Del 20 al 28 de marzo de 2014, la Facultad de Trabajo Social de la Universidad Complutense de Madrid pone en marcha el curso Aspectos Psicosociales de la Diversidad Sexual: Intervención social con LGTBfobia. Entre los contenidos puedes encontrar: orientación e identidad sexual, aspectos psicológicos y jurídicos de la orientación sexual y la intervención social con población LGTB.

El curso es gratuito y cuenta con ponentes como Lola Martín, Ana Gómez, Isidro García, Vanesa Asenjo y Manuel Ródenas. Para inscribirte, solo tienes que pinchar sobre estas letras.

Momento San Valentín

Me declaro contraria y opuesta al día de san Valentín. ¿Por qué? Porque es el colmo de la representación del capitalismo y  del hetropatriarcado. Y sí, estoy en contra del consumismo por consumir y de la acumulación de productos para ser alguien. Pero también estoy en contra de un día que representa un amor violento, tan violento que se basa en la dependencia y en la jerarquización humana. Por si alguien no lo sabe aún, yo creo en la sostenibilidad de la vida y, por tanto, en lo esencialmente humano  y, también creo en la justicia social. Asi que, a grosso modo, soy antisistema.

Pero claro, este no es el momento de hablar de mí. Es el momento del supuesto “día del amor”. Te bombardean con mensajes consumistas. Te bombardean con mensajes de cómo tienes que ser para que te quieran y cómo tienes que amar. Te socializan en una cultura violenta; pero, una inmensa mayoría de la gente, no dice nada. Consideran que eso es  lo normal. Y, os aseguro que el daño que hace este día, por ejemplo a la adolescencia, no es normal. Basta con entrar en un aula de secundaria y preguntar para contrastar este dato, descubrirás inseguridades, búsqueda de un amor basado en la media naranja, celos, dependencia… bueno, ya lo sabéis.

Y, el tema es que cuando una se declara contraria a este día, saltan todos los resortes de las mentes machistas. Tienen que contestar y dar su opinión  supuestamente “progre” o “liberal”. “Oye, que se trata de un día que si quieres lo celebras y si no quieres, no. No seas radical”. Nunca reaccionan ante los mensajes misóginos y capitalistas, pero el tuyo… el tuyo parece ser muy hiriente.

No-querida mente machista y supuestamente (según tú) abierta, tengo que decirte que tu reacción ya transmite un mensaje. Tú no hablas de libertad para celebrar o no dicho día. Tú cuestionas cualquier pensamiento crítico con dicho día. Te parecerá razonable, pero la libertad es poder expresar ese pensamiento crítico que no es que sea cualquier cosa, sino que supone violencia.

Kulturfem: Babes in Toyland

Babes in Toyland fue otro de los grupos íntegramente femeninos de mi adolescencia. No sé si definirlas como punk, post punk o grunge, lo que está claro que es un rock muy potente, empoderado y que transmite una fuerza excepcional. Fueron fuente de influencia para muchos grupos del movimiento Riot Grrrl, pero ellas nunca se asociaron explícitamente con este movimiento.

Sus melodías son sencillas y en muchas ocasiones recuerdan a aquellos grupos de los 90 de la época grunge. La voz y letras de Kat Bjelland evocan al punk más crudo y agresivo.

El grupo se formó en Mineápolis en 1987, lo integraban  Kat Bjelland (vocalista, guitarra), Lori Barbero (batería) y Michelle Leon (bajo), la cual fue sustituida por Maureen Herman en 1992. También fue partícipe durante un breve período de tiempo  Courtney Love, pero según comenta Bjelland, solo ensayó con ellas una vez y fue catastrófico; pero eso sí, tuvieron tiempo de intercambiar letras que luego ambas interpretaron con sus respectivos grupos.

Babes In Toyland empezaron a ser conocidas por la imagen de “muñeca” de Bjelland  (más conocida por estilo  kinderwhore). En 1989, grabaron su álbum debut Spanking Machine. Gracias a este disco la banda americana alternativa Sonic Youth las invitó a su gira europea para que abrieran sus conciertos como teloneras.

En 1992 grabaron su LP de mayor éxito comercial, Fontanelle, del que llegaron a vender únicamente en EE.UU 200.000 copias. Todo este éxito les llevo a que las contratasen para actuar en un festival tan prestigioso como el Lollapalooza de ese mismo año junto a bandas como Alice in Chains, Dinosaur Jr. y Rage Against the Machine. También participaron en show llamado Rock Against Domestic Violence, contra la violencia machista.

Tres años más tarde grabaron el que fue su último disco Nemesister, un disco más experimental y espontáneo musicalmente, otro gran disco.

El fin de Babes in Toyland fue en el 2001, cuando Bjelland formó una banda paralela llamada Katastrophe Wife y antepuso  ésta, a su banda original. También influyó el abandono de la bajista Maureen Herman.

Para acabar, decir que este grupo no tuvo tanta repercusión como otros grupos de los 90, pero merece la pena recuperar sus discos, sobretodo los 2 primeros y gozar de los guitarrazos y la fuerza vocal. Eso sí, no pararas de bailar.

Texto realizado por alzaElpuño

Imprescindibles feministas

Se acerca el 14 de febrero, el día en que se celebra el 1Billion Rising for Justice. ¿Qué hay que hacer? Pues levantarse, bailar y liberarse.

Se trata de una batucada cuyo lema será la justicia y el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos.

Nos vemos el viernes 14 de febrero a las 20 horas en la plaza de Agustín Lara de Lavapiés (Madrid).

¡Únete y rompe el silencio al ritmo de los tambores!

El espacio

Las mujeres no poseemos más del 1% de la riqueza del planeta. Eso en términos económicos porque de lo que no se cuenta como PIB, de eso, sí que tenemos. En realidad, lo que cuenta es lo que ocupa espacio, pero nosotras no tenemos ni derecho a eso.

Imagina, si hasta nos obligan a tener cuerpos extremadamente delgados para ser lo que dicen que tiene que ser la belleza. Y, no es solo en nuestra cultura occidental. Mira los pies de las chinas. Aunque es verdad que hay algunas culturas que sí nos quieren con carnes, pero oculta bajo melfas o túnicas.

Recuerdo, cuando era pequeña, cómo aprendí esta norma del heteropatriarcado. Yo iba a clases de ballet. Recuerdo como nos instruían en la postura que teníamos que poner a pesar de no ser ballet profesional. Recuerdo que las normas básicas eran meter tripa y apretar el culo.

Lo aprendí rápido. El siguiente paso era controlar que no saliera la tripa. Asi que… no quedaba otra, había que respirar sin que se note y, por supuesto, hacer una respiración alta y por tanto, incompleta. Así sale menos tripa. También lo aprendí rápido.

Ahora, con los años, me doy cuenta: esa era una forma ideal para ocupar poco espacio. A día de hoy, mis respiraciones siguen siendo cortas, algo ideal para los momentos de ansiedad y estrés. Por más que me esfuerzo, no sé respirar, incluso cuando hago deporte. Me lo enseñaron bien y yo lo aprendí perfectamente. 

Pero he descubierto que me encanta inflar mi barriga y rascármela de vez en cuando.

Te Regalo la A

Te Regalo la A participa en un concurso, concretamente en  los Premios 20Blogs, VII Edición. Y, oye, vamos a intentar ganarlo. Si alguna vez has leído el blog o si lo lees ahora por primera vez y te ha gustado, estaremos gozosas de recibir un voto tuyo. El premio que nos darían sería una estatuilla, pero para Te Regalo la A supone mucho más, porque premiaría el esfuerzo voluntario y anónimo para llegar a lo colectivo.

El tema de cómo votar no es muy molesto. ¿Qué hay que hacer? Registrarse en 20 minutos. Pincha sobre estas palabras para acceder al registro. Puedes rellenar todos los campos, no son muchos. Pero también se puede hacer pinchando sobre el botón del Facebook o Twiter, de esta forma, el registro es automático.

El siguiente paso es pinchar sobre estas palabras. Ahí es donde tenéis que votar, sólo hay que hacer un click.

De momento, ya os doy las gracias por haber leído este post. Y, si sube el número de votos, os garantizo que me emociono porque hay mucha ilusión puesta en este blog.

Ya aprovecho para mandaros un fuerte abrazo.

Imprescindibles feministas

Movimiento Feminista de Madrid –Nos vemos el 8 de Febrero de 2014 a las 12:00 desde Glorieta de San Bernardo a Plaza de Callao.

Cuando reclamamos el derecho al aborto hablamos del reconocimiento de las mujeres como sujetos de plena autonomía ciudadana, por tanto, nadie puede negarnos nuestro derecho a decidir sobre nuestras vidas, cuerpos y sobre si queremos o no ser madres. Por ello, como personas autónomas, responsables, libres e iguales, las mujeres exigimos:

- La retirada del Anteproyecto de ley sobre el aborto, ya que atenta contra los derechos humanos reduciendo la autonomía, libertad, salud, vida y dignidad de las mujeres.

- El aborto es un derecho y, por tanto, no debe estar en el Código Penal. Esta circunstancia sólo genera diferencias sociales y discriminación.

- Garantizar una educación afectivo-sexual libre de estereotipos sexistas y homófobos. En lugar de de proponer una ley de educación (LOMCE) que prioriza la religión sobre cualquier cuestión de justicia social.

- Que se respete la autonomía de las mujeres, incluidas las de 16 y 17 años, para decidir sobre su embarazo.

- Que se regule la objeción de conciencia para evitar que ninguna mujer se quede sin asistencia sanitaria.

LAS MUJERES DECIDEN, EL ESTADO GARANTIZA, LA SOCIEDAD RESPETA Y LA IGLESIA NO INTERVIENE

Carmen

He pasado unos días en Budapest y, ¿cómo no? He ido a la ópera. Allí, donde la cultura tiene precios populares. Como andábamos con dificultades de fechas y era mi primera vez en la ópera, no elegimos mucho la obra y nos tocó ver Carmen. Yo no sabía que Carmen era una ópera en la que se relataba un feminicidio. Y, disculpad mi ignorancia, pero estaba loca de contenta por ver una obra que era tan conocida y en la que podía reconocer varias de las piezas que la componen.

Estaba entusiasmada. Poco a poco me fui dando cuenta de algo que no quise expresar por eso de quizás me esté equivocando. Pero sí, yo veía violencia y, al final, no me pude contener y se lo dije a mi acompañante. Por suerte, él también lo veía. Nos temíamos lo peor y así aconteció: una historia de una mujer fuerte que toma decisiones, las suyas. Su asesino un soldado que se enamora de ella. Ese amor que le profesa es el amor romántico, el cual le “da derecho” a exigirle a ella  que se enamore de él y que haga lo que él desea. De hecho, como no es así, la  trata como a un objeto, la violenta y la asesina. Acaba la historia y la gente aplaude.

Me incomoda, me repulsa, me llena de rabia el hecho de pensar que Bizet estrenó esta ópera en 1875, que se sigue interpretando y, lo peor de todo, aplaudiendo por la gente, no siendo cuestionada, ni criticada. Sé que hay otras versiones y yo las aplaudo. Pero, ¿cómo es posible que, a día de hoy, sigamos aplaudiendo una historia de posesión, celos y asesinato? Carmen es una historia de violencia contra las mujeres, una historia de odio hacia las mujeres y yo lo rechazo.