“Mi profesión, las letras.
Mi vocación, vivir.
Soltera por capricho.
Universal, por votación.
Amante de las fieras, de los niños.
Y de los que me quieran más que yo”
(“Mujer de verso en pecho”, pág. 131).
Hace tiempo que la perdimos, fue en el año 98. Sin embargo, aún habita en sus libros, sus poemas y en nuestros recuerdos.
Gloria, esa mujer social, pacifista, feminista, enamorada y defensora de los derechos humanos que estaba comprometida con la vida libre. Era una mujer valiente, tierna y luchadora. Resulta llamativo, decir de ella que era pacifista y luchadora en la misma frase. Pero sí, su lucha tenía como arma la palabra y la dirigía estupendamente contra las guerras y cualquier clase de injusticia social. Sencilla y cotidiana nos devolvía la visión más humana de la vida, porque ella creía en las personas y en el amor, incluido el amor prohibido y el marginal. Y, así se convirtió en una transgresora de la historia de la literatura.
Fue cofundadora del grupo Versos con Faldas, maestra, fundadora y directora de una revista poética, escritora... Recibió premios, incluido el Premio Internacional Andersen. En resumidas cuentas, su poesía es una de las voces más frescas y valientes de la poesía contemporánea española. Pero a pesar de todo, queda tanto por estudiar de ella, queda tanto por conocerla...
1 comentarios :
oleole, la gloria y sus versos ¡¡¡ mágica, poderosa, empoderadora ¡¡¡ muy bueno compa ¡¡
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